Las playas españolas en las que se han visto tiburones en los últimos años
Estos son los lugares de la costa española en los que se han producido los últimos avistamientos de distintas especies de escualos
Madrid
En las últimas semanas, los avistamientos de tiburones en aguas de la costa española han generado cierto clima de preocupación entre los vecinos y los turistas. Muchos ciudadanos se preguntan cuáles son las playas en las que existen más posibilidades de registrar la presencia de estos animales marinos en el agua.
El fenómeno de los tiburones ha llegado a tal punto de popularidad que medios británicos han ido informado a través de sus páginas sobre los lugares del litoral español en los que en los últimos meses se han visto tiburones. Todo ello, con el objetivo de que los ciudadanos británicos que piensen visitar estos meses estivales España sean conocedores de dónde puede haber tiburones y dónde es muy improbable.
Lo cierto es que la presencia de tiburones surcando las aguas del mar Mediterráneo no es algo poco común ni nuevo, su presencia es desde el comienzo de los tiempos notable y marcada por la diversidad de especies de escualos. Según los expertos, viven en las profundidades de la costa mediterránea hasta 45 tipos de tiburones diferentes, algo que hace de este ecosistema marítimo uno de los que más población posee.
"Hay que perder el miedo a los tiburones" Charlie Sarria, biólogo marino
Los más comunes, por cantidad y frecuencia en sus avistamientos, son los tiburones tintorera, también llamado tiburón azul. Tienen una dimensión media de 2,5 metros en su largo y pesan alrededor de 80 kilogramos. Son una especie que acostumbra a emigrar y son conocidos por su cuerpo delgado y su tono azul fulgente.
Otro tiburón también muy usual es el cañabota gris, que se caracteriza por tener un tamaño y un peso mucho mayor. Esta especie tiende a permanecer en aguas cálidas y tiene una importante presencia en las distintas zonas del Mediterráneo español.
Por último, los tiburones pintarrojas, menudos en sus dimensiones y que prácticamente no representan riesgo alguno para los bañistas, y los cazones, que pueden alcanzar los dos metros de longitud y los 45 kilos de peso.
Hay que ser consciente de que la mera presencia de un tiburón en las cercanías de la orilla de una playa no tiene porque suponer forzosamente un peligro para la integridad de quien se está bañando en ese momento. De hecho, es infrecuente que estos animales ataquen a los humanos, además de que muchos expertos en estos animales acuáticos han advertido de que están sufriendo un proceso de extinción en las aguas del Mediterráneo.
Estos son los lugares en los que últimamente se ha registrado su presencia
Los tiburones, a pesar de ser un habitante común de las aguas mediterráneas, también viven en el entorno del Estrecho de Gibraltar y el océano Atlántico, donde destaca su presencia en Galicia, y en el mar Cantábrico.
En las áreas del norte, concretamente en las aguas frías del Atlántico y el Cantábrico, es donde pueden encontrarse los tiburones más grandes, que son los ejemplares más peligrosos tanto para turistas como para bañistas frecuentes. Cuanto más profundamente descienda uno en estas aguas, más posibilidades tendrá de encontrarse con un tiburón al estar invadiendo su hábitat natural.
Entrevista a María Pozo, investigadora del grupo 'Ecología y Conservación Marina' (UMU)
Las comunidades de Galicia y Asturias son dos de las regiones en las que se ha registrado una mayor presencia de escualos, especialmente de grandes tiburones como el que se llegó a ver nadando en las aguas de la ría de Vigo, un tiburón blanco de más de 100 kilogramos. Cuando salen a la superficie, lo hacen por la necesidad de buscar alimento.
En junio de 2022, en Oleiros (A Coruña) se vio a un tiburón peregrino durante un mismo día en dos playas y, días después, apareció varado y muerto como consecuencia una obstrucción digestiva tras ingerir numerosos objetos plásticos. También en junio del pasado año, apareció una hembra adulta de tiburón solrayo en la ría de Arousa (Pontevedra), una especia que nunca se había visto en el litoral gallego.
En Valencia, Alicante y Baleares son tres zonas del país en las que también se han concentrado los avistamientos. Sin embargo, las especies propias de estas áreas prácticamente no representan amenaza alguna para las personas que disfrutan de un baño en el Mediterráneo. Suelen ser ejemplares pequeños y reacios a compartir espacio con los humanos.
Más información
En 2017, un tiburón azul obligó a desalojar a prisas la playa de la Patacona (Valencia) durante dos horas. Un mes antes, se detectó la presencia de un tiburón herido, una musola de 1,20 metros, a unos cinco metros de la orilla en la playa de Las Arenas (Valencia) que obligó a prohibir el baño.
En la provincia de Alicante, por su parte, el 16 de junio de este año un tiburón provocó el pánico de los bañistas de una playa de la costa de Orihuela. En 2016, un bañista de 40 años resultó herido tras ser atacado por un tiburón en una playa de Elche, y en 2018, un tiburón de grandes dimensiones fue avistado durante en las inmediaciones de la isla de Tabarca.
Y en Baleares, en 2018, se produjo el histórico avistamiento de otro tiburón blanco de cinco metros en la isla de Cabrera (Mallorca), algo que no ocurría desde al menos 30 años. Más recientemente, en marzo de 2023, un ejemplar de tiburón azul de dos metros apareció nadando cerca de la orilla la playa de Cala Galdana (Menorca), y en mayo de este año, se cerró el baño en la playa de Son Bou (Menorca) al registrarse claramente la presencia de un tiburón tintorera, después de que se acercará a la orilla hasta en cuatro ocasiones.
Muere el tiburón que sorprendió a los bañistas en una playa de Orihuela (Alicante)