"No podía mantener la ilusión": el mejor sumiller del mundo sorprende al dejar Diverxo para irse a "descansar"

Madrid

Miguel Ángel Millán, reconocido como el mejor sumiller del mundo en la última gala de The World's 50 Best Restaurants, ha decidido dejar el restaurante Diverxo para irse a descansar a su casa de la playa. Una decisión que ha pillado por sorpresa a muchos y que, según él, se debe solo a que tiene la sensación de haber completado un ciclo y que quiere descansar.

"Mi intención es parar y descansar", asegura a Gastro SER. "Considero he completado un ciclo y voy a parar. Es cierto que a mucha gente le ha sorprendido, pero yo creo que es una manera bonita de irte. No me parecía elegante ponerme a buscar trabajo mientras estaba allí, pero es que además llevo seis años trabajando a un nivel de exigencia altísimo. Me voy a tomar un tiempo en la casa de la playa".

Millán reconoce que ya le ha llegado alguna oferta de trabajo, pero que ahora mismo solo quiere descansar. ¿Hay algún otro motivo para dejar un proyecto tan prestigioso y hacerlo, además, poco antes del traslado de Diverxo a un nuevo local? Según dice, sí hay algunas circunstancias personales que le han ayudado a tomar la decisión, pero no hay motivos de salud mental, ni tampoco falta de libertad profesional.

"Seis años extraordinarios"

"Está claro que trabajar en un sitio de esas características conlleva un gran desgaste y no podía mantener la ilusión, pero yo creo que la meta ya estaba cumplida", señala por teléfono. "Siempre he tenido la suerte de involucrarme en proyectos que me interesaban mucho. Y entré en Diverxo con un reto muy grande porque cuando llegué no había una apuesta por el vino, así que me voy muy satisfecho".

El sumiller ha publicado un post en su cuenta de Instagram en el que anunciaba el servicio del pasado jueves fue su último servicio en Diverxo, agradeciéndole la chef Dabiz Muñoz "la oportunidad de trabajar junto a él" y también su “generosidad”, matizando que su despedida debe entenderse como "un hasta pronto".

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"Han sido seis años extraordinarios, llenos de experiencias positivas que me acompañarán siempre en mis recuerdos, donde he intentado poner mi granito de arena para que la parte líquida ensalce el talento de la cocina del chef. Donde me he sentido feliz y realizado como sumiller. He dado lo mejor de mí con la ayuda de mis compañeras y compañeros de sala y sumilleres que han sido parte fundamental del éxito, llevándonos a conseguir una de las mejores experiencias del vino que se pueden disfrutar en un restaurante, y a mí, personalmente, a cumplir un sueño", ha publicado.