El metro de Valencia viajaba al doble de la velocidad permitida

El convoy del metro de Valencia que ayer sufrió un accidente en el que murieron 41 personas viajaba a 80 kilómetros por hora, el doble de la velocidad permitida en el tramo en el que se produjo el siniestro, según ha confirmado el conseller de Infraestructuras en rueda de prensa. Este exceso pudo ser provocado por un desvanecimiento del conductor. Además, un sindicato ha denunciado que éste conductor no era maquinista sino agente de estación y que la curva estaba mal señalizada.

El conseller de Infraestructuras de la Generalitat de Valencia, José Ramón García Antón, ha confirmado los datos en una rueda de prensa tras la primera reunión de la comisión interdepartamental de seguimiento del accidente de Ferrocarrils de la Generalitat, con lo que confirma la versión ofrecida por el sindicato SIF, también asistente a la reunión.

Jorge Álvarez, portavoz del Sindicato Independiente Ferroviario (SIF) explicó a la Cadena SER que el sistema que impide superar los 40 km/h (Freno Automático Puntual) sólo se activa en las zonas de andenes, y no en los trayectos entre estaciones, dato que también ha ratificado el conseller de Infraestructuras. Por lo tanto, cobra fuerza la hipótesis de que el conductor pudo sufrir un desvanecimiento.

Dudas sobre la experiencia del maquinista

Álvarez, tras la reunión de la comisión de seguimiento, explicó que el conductor del convoy no era maquinista, sino un agente de estación que había recibido clases prácticas durante 14 días, cuando el periodo habitual es de dos meses. El SIF considera que el siniestro fue un "desgraciado accidente" motivado por una "manifiesta falta de inversión" de la Generalitat en el transporte público, por lo que solicita la dimisión de García Antón.

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Sin embargo, García Antón informó de que el maquinista, una de las 41 víctimas mortales del accidente, había entrado en la empresa en 2002 trabajado primero como inspector e interventor en la Línea 1 y tras realizar 224 horas de prácticas se le consideró habilitado para conducir un tren, lo que hacía desde el pasado mes de abril.

Curva "muy mal señalizada"

Álvarez agregó que la curva en la que se produjo el accidente "está muy mal señalizada" y que la línea cubierta por el metro carece de medidas técnicas, como un frenado automático, para impedir que un convoy exceda la velocidad permitida y descarrile.

García Antón ya apuntó esta mañana en los micrófonos de Hoy por Hoy la tesis del exceso de velocidad y descartó la rotura de una rueda o el desprendimiento de parte de la bóveda del túnel como causa del accidente. En la rueda de prensa de la tarde ha descartado, asimismo, que el vehículo sufriera una sobrecarga. Los carriles, soportes, traviesas y otros elementos de la infraestructura de la vía tampoco presentaban daños. Además, ha asegurado que ningún sistema de seguridad habría podido evitar la tragedia.

Juzgado de reciente creación

La Generalitat ya ha informado de que el convoy siniestrado pasó la revisión con éxito hace sólo siete días. La misma línea siniestrada ayer, la 1, ya sufrió un accidente en septiembre del año pasado en el que hubo 35 heridos. Entonces chocaron tres convoyes.

La investigación del peor accidente de metro en España está en manos del juzgado número 21 de Valencia, de reciente creación.

El segundo de los vagones accidentados ya ha llegado a los talleres de Ferrocarrils de la Generalitat.