El cardenal de Madrid evita posicionarse sobre enterrar a Franco en La Almudena: "es cosa del Gobierno y familia"
"Lo diré aunque me maten", ha declarado Carlos Osoro, cardenal arzobispo de la capital
Madrid
El cardenal arzobispo de Madrid, Carlos Osoro, ha reiterado este viernes que el debate sobre dónde trasladar los restos de Francisco Franco en caso de que el Tribunal Supremo avale la exhumación es cosa del Gobierno y de la familia del dictador. "Y lo mantendré aunque me estén matando", ha zanjado.
Más información
Osoro ha respondido así en la presentación del encuentro internacional "Paz sin fronteras" que se celebra en Madrid desde el domingo hasta el martes al ser preguntado por si considera que la catedral de la Almudena era el lugar más idóneo para llevar los restos de Franco desde el Valle de los Caídos.
"Es cuestión del Gobierno y de la familia, y esto es lo que digo siempre y lo mantendré aunque me estén matando", ha contestado.
Será la Sección cuarta de la Sala de lo Contencioso del Supremo la que decida, el próximo 24 de septiembre a las 10.00 horas, si respalda la exhumación del dictador, una promesa del Ejecutivo de Pedro Sánchez que el Alto Tribunal paralizó cautelarmente a petición de la familia Franco hasta que hubiera sentencia.
Ese día, los magistrados resolverán definitivamente si permiten la exhumación de Franco del Valle de los Caídos y su posterior inhumación, bien en el cementerio de El Pardo-Mingorrubio, como quiere el Gobierno, o bien en la cripta de la Almudena, lugar elegido por la familia.
Contra Vox: "El mundo no se arregla construyendo muros"
El cardenal arzobispotambién ha replicado este viernes a Vox que "el mundo no se arregla construyendo muros, sino haciendo puentes", y ha invitado a "hacer casas, no fortalezas" con puertas para que se pueda "pasar de una habitación a otra" y para que nunca falte la comunicación. Así ha contestado Osoro al ser preguntado por su opinión sobre la propuesta lanzada ayer por Vox de construir un muro en Ceuta y Melilla de "un grosor, resistencia y altura" que lo haga "impenetrable e infranqueable".
"El mundo se arregla no construyendo muros, sino haciendo puentes, y esto no es buenismo, es lo que me sale de la conciencia misma de mi ser cristiano y de mi ser pastor", ha subrayado el cardenal. De esta forma, ha abogado por hacer "casas, no fortalezas", aunque otra cosa sea ver "las reglas del juego para caminar por la casa. Pero yo opto por la casa", ha añadido.
La misma opinión ha expresado cuando ha sido preguntado por la posición de los gobiernos europeos frente al reto migratorio: "La casa es el lugar donde se reúne la familia, y en la familia hay de todo, niños, jóvenes, matrimonios, más listos y menos listos, pero todos se sienten a gusto y se les busca el lugar más oportuno para que se construyan como personas". "¿Estamos dispuestos todos juntos a hacer casa, donde nadie sobra y somos necesarios todos, donde no se mide a la gente por el rasero de la idea que yo tengo, sino por la que tiene Dios del ser humano, que es que todos somos iguales? No es poesía lo que he dicho, es necesario que esto alcance el corazón de nuestra vida", ha apelado.
Y, para ello, será necesario que todos se "desarmen" de las "armas, algunas ideológicas", que todos tienen "en su fortaleza contra alguien, o contra situaciones", ha dicho Osoro para pedir a continuación que "seamos capaces de ser muy limpios y dejar de hacer en nuestras vidas fortalezas".