Qué fue de... Michael Laudrup, el 'príncipe' de Dinamarca ausente en la conquista de la Euro 1992

Michael Laudrup (Frederiksberg, Dinamarca. 1964) es un exfutbolista que fue puntero en el fútbol danés de las décadas de los 80' y 90'. En su larga trayectoria en la élite, España pudo deleitarse con la calidad superlativa de un mediocampista que jugó durante siete años en el campeonato nacional repartidos entre el FC Barcelona y el Real Madrid. Tras colgar las botas y ponerse al frente de varios banquillos desde el otro lado del fútbol, la leyenda de Dinamarca está inmerso en una nueva vida muy alejada del foco mediático.

Su amplísimo dominio con el control en los pies le coronó como 'príncipe' de una Dinamarca que, después de un legado discreto, empezó a gustarse desde la Euro de Francia 1984, con continuidad en un Mundial de México 1986 en el que la figura de Laudrup se reafirmó en la élite frente a todo el planeta. Aquel combinado, bajo su mando, causó sensación con una impecable fase de grupos mundialista en la que doblegaron a Escocia, Uruguay y Alemania, con actuaciones para la memoria del '10' del equipo.

Casualmente, España fue su verdugo en ambos torneos. Pero el país que tantos quebraderos de cabeza trajo al mayor de los hermanos Laudrup terminó acogiéndolo en su propia liga. Lejos de su país, el talentoso jugador había arrollado en una primera etapa en Italia en la que defendió las camisetas de Lazio y Juventus de Turín, paso previo a su fichaje por el FC Barcelona en 1989, ya como una estrella internacional.

Repertorio imitado en la actualidad

Su leyenda se agrandó a pasos agigantados en estos años en los que dejó un repertorio de asistencias, regates y gestos técnicos del más alto nivel. Entre ellos está un pase con sello propio, golpeando el balón en dirección contraria a la que apuntaba con la mirada, que siempre será conocido por los futboleros como 'pase a lo Laudrup' independientemente de su nuevo imitador.

Genio y figura de un Barça que marcó un 'antes' y un 'después' en su historia, al mismo tiempo sobrellevó de la peor manera sus tiranteces con su selección nacional. La etapa de un histórico como Josef Piontek al frente del banquillo terminó en 1990 después de más de una década y su sustituto, Richard Möller Nielsen, no encajó nada bien con la idea de juego de Michael Laudrup.

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La histórica Dinamarca de 1992

Mientras el centrocampista aglutinaba títulos consecutivos de Liga o incluso una Champions pionera para las arcas barcelonistas, el conflicto con su federación le llevó incluso a salir del equipo en un momento que a la postre fue histórico.

En el rebote más exitoso de la historia del deporte, Dinamarca acudió como invitada a la Eurocopa de Suecia 1992 relevando a una Yugoslavia que quedó apartada por el estallido de la Guerra de los Balcanes. La preparación fue caótica, con escasos días de antelación y con una convocatoria cogida con pinzas cuando gran parte de los integrantes del vestuario se encontraban de vacaciones. Entre los citados no se encontraba Michael Laudrup, pero sí su hermano pequeño Brian, que resolvió sus mismas diferencias justo a tiempo para convertirse en uno de los hombres del torneo y alzar la histórica copa de su selección.

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El esperado regreso de Michael Laudrup a los compromisos internacionales se dio un año más tarde, de nuevo en un contexto de escaso protagonismo del fútbol danés en el mundo. Tras la reconciliación llegó el valiente cambio de aires de Barcelona a Madrid, un final de carrera exótico y una reconstrucción como entrenador. En esta nueva faceta también pudieron disfrutarle los aficionados españoles, que guardan buen recuerdo especialmente en Mallorca y Getafe.

¿Qué hace ahora?

Tres años han pasado ya desde su última experiencia en los banquillos. Tras una escapada exótica al fútbol qatarí, Laudrup se enroló por última vez al frente del Al-Rayyan y desde entonces no ha vuelto a asumir un cargo como entrenador. Si esta ha sido su último aporte a su currículum o no lo dirá el tiempo, aunque por el momento no se plantea regresar a estos lares, como comentó este 2021 en una entrevista con el diario El País.

"Lo echo de menos, pero quizás no lo suficiente", reseñaba en esta conversación. Este tiempo alejado del césped lo está pasando en su Dinamarca natal, donde disfruta de su familia (y ya de sus nietos) y también aparece en algunas retransmisiones deportivas como comentarista. Una vida muy diferente lejos de los focos, aunque recalca que de este modo también es feliz.

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Sus últimas apariciones en público han sido durante la Euro 2020, a la que ha podido asistir como uno de los invitados de peso a los partidos de su selección, Tras el estreno, además, charló con Carrusel Deportivo para dejar sus impresiones de lo vivido en el estadio Parken de Copenhague durante el gran susto por el desplome de Christian Eriksen.