Canciones mucho más sostenibles que un "chuletón al punto" para la España que escuchaba a Georgie Dann

Madrid

"Le llamarás filete a un cadáver, pero es lo mismo". La letra de Go vegan, del rapero Ricky Hombre Libre, es muy explícita y, vista con retrospectiva, ilustra a la perfección cómo ha evolucionado el trato del vegetarianismo-veganismo en la música española del siglo XXI: ¡de la burla al activismo!

Un proceso que, en el fondo, refleja la evolución de la sociedad misma. Un proceso que, además, no es lineal. Hay pasitos para adelante y otros para atrás, como se pudo ver en la polémica mediática desatada tras las declaraciones del ministro Alberto Garzón sobre la recomendación de seguir una dieta menos carne, a lo que el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, respondió con una frase desafortunada: "A mí, donde me pongan un chuletón al punto, eso es imbatible".

Las alusiones burlescas a la dieta vegana o vegetariana son una constante en la música española de los últimos 20 años. De Vainica Doble a Proyecto Luisbo pasando por la grotesca versión del Mediterráneo de Serrat que los gallegos Puta España Musical transformaron en Vegetariano.

La tendencia, de todas formas, está empezando a cambiar. El murciano Pablo Barraka describe en uno de sus temas la envergadura de los cambios que suelen ir aparejados a un cambio de dieta, y los madrileños Terrier ilustran en Vegana (entre semana) lo difícil que resulta cambiar hábitos muy asentados, a pesar de que se emprendan con convicción, respeto e incluso admiración.

Joan Colomo fue vegetariano durante un tiempo, pero tuvo que dejarlo porque resultaba muy complicado estando de gira. La experiencia, sin embargo, le sirvió como inspiración para el tema Fruit tropical. Claro que también hay que se plantea su activismo con estrategias más agresivas, como Sons Of Aguirre, quien lo circunscribe solo a las entrevistas, como Bunbury, o quien lo lleva a sus canciones, pero tampoco mucho, como Nega, de Los Chikos del Maíz.

"El veganismo también es una opción política, pero a la gente le cuesta. Mira la que se montó con Garzón. Pero es que es una cuestión de supervivencia. Hay que hacerlo, es una cuestión de vida o muerte. El debate cuñado que se montó con el presidente hablando del chuletón no es nada serio", dice el rapero valenciano.

Para comer menos carne no es necesario hacerse vegano o vegetariano, de todas formas. Basta con seguir una dieta equilibrada, como la que predican Oques Grasses en La granja, posicionándose en contra de las Macrogranajas de las que habla Forrasao y normalizando el hecho de comer tofu (The Mamzelles) o galletas veganas (Marie Bernete).