Nueve recetas (con o sin calabaza) para celebrar Halloween en la cocina

Madrid

Podemos estar más o menos de acuerdo con Halloween y toda su parafernalia, pero en los próximos días va a ser tan complicado vivir al margen de la gente disfrazada de zombie como intentar hacer la compra sin toparse con una montaña de calabazas, así que también podemos optar por sumarnos a la fiesta a nuestra manera y deleitar a quien nos apetezca con un plato creativo de calabaza, algún dulce terrorífico o incluso un cóctel otoñal.

Ahí van unas cuantas ideas de receta que seguro que a Rubén Mendi —el navarro que le pone música rock a las calabazas gigantes— le vienen fenomenal, pero tampoco es que haga falta tener un ejemplar de 990 kilos en el huerto: basta con tener ganas de disfrutar cocinando, comiendo y bebiendo:

Fantasmas de Halloween

Hay quien no necesita muchas excusas, pero también quien se anima a preparar algunos dulces con los que disfrutar de la noche más terrorífica del año e incluso agasajar a los bajitos que se nos presenten en la puerta preguntando: ¿truco o trato? Los usuarios avanzados quizá se atrevan con algo más complicado, pero estos fantasmitas de merengue son realmente fáciles de preparar.

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Crema de calabaza violín con calamares y gambas

Una propuesta del chef con estrella Michelin Julio Fernández (Abantal) que es fácil de preparar, sabrosa y ligera, y que además que funciona muy bien como entrante para una cena con amigos. La calabaza violín es ligeramente dulce y el contraste de sabor con con los productos del mar (calamares, vieiras, espardeñas, etc.) resulta delicioso. Pero también se puede jugar con zanahoria o naranja...

Calabaza asada, tzatziki de yogur y menta, Ras el Hanout, granada y kale

A Eva Espallargas, autora del recetario Fresa & Pimienta (y también del blog homónimo) le encanta la calabaza asada porque su carne melosa mantiene toda la humedad y el dulzor. En esta receta la sirve aderezada con la mezcla de especias Ras el Hanout y el toque fresco de un tzaziki de yogur y menta (sin ajo). El resultado es un contraste cítrico que va perfecto con el dulzor de la granada. Y para acabar, unas pequeñas chips de col kale muy crujientes. ¡Os va a encantar!

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Cóctel de Halloween: 'Mysterious Death'

El mítico bartender Javier de las Muelas asegura que nunca se ha disfrazado, pero que le encanta Halloween "porque nos hace pensar en los misterios de la vida y de la muerte, aunque sea de broma". Por eso y porque es una buena ocasión para compartir y conversar alrededor de un cóctel como este (en casa o fuera).

Sopa de calabaza y naranja

La calabaza es muy versátil: sirve para preparar platazos con los que lucirse, y también para preparar algo rápido con lo que salir del paso en el día a día de un hogar. Esta receta de Martín Berasategui, supersencilla y socorrida, propone una combinación de calabaza con naranja que resulta ideal para cenas ligeras o para el tupper del trabajo. Por eso aspira a convertirse en tu plato estrella del otoño...

Gofres de calabaza asada con caramelo de miso

Eva Espallargas, de Fresa & Pimienta, propone también un brunch o un desayuno dulce/salado para esta época del año. La base de su receta es la de un gofre a la que se le añade puré de calabaza asada y, para endulzarlos, le añade un original caramelo líquido de miso blanco que aporta además un ligero contraste salado.

Cóctel de Halloween: 'Otoñal'

Este otro cóctel de Javier de las Muelas inspirado en el otoño, sus sabores y sus colores, también resulta ideal para celebrar la noche de Halloween porque, además de de incorporar calabaza, ¡se puede usar como envase!

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Pastel de Halloween (y sus fantasmas)

Halloween es una fiesta en la que se conjuga lo más divertido —ir disfrazado— con lo más goloso —la recaudación de chuches—, pero el hecho de pasar un buen rato en la cocina puede ser un premio en sí mismo y atreverse con este pastel de chocolate y calabaza puede ser el mejor colofón para la fiesta más misteriosa.

Calabaza, kombucha y queso azul

La calabaza es un producto muy versátil que acepta cientos de aplicaciones, pero muy pocas pueden superar el efecto ¡ñam! de esta combinación con las pipas de calabaza caramelizadas, el queso azul (Stilton, por ejemplo) y el vinagre de kombucha. Una deliciosa creación de los chefs del restaurante valenciano Fierro que siempre se puede simplificar prescindiendo de la parte fermentada...