
Los chicos también lloran
Pablo Alcalde es ingeniero, pero no construye castillos; ni naipes ni de nada. Se dedica a perforar pozos, repartir tanques de agua y colocar letrinas en cualquier lugar donde la guerra, el hambre, la miseria, las enfermedades, la naturaleza, o todos juntos han conspirado para crear un escenario de muerte
15/03/2016 - 08:45
Carles Francino
Beirut










